El grillo común negro (Gryllus fulvipennis) es una especie de grillo de tamaño grande, ligeramente más pequeño que el grillo rojo (Cratomelus armatus). Con su aspecto oscuro de élitros café y negro, al igual que su cuerpo, los grillos comunes permiten ser identificados sin inconvenientes. Las hembras son reconocibles por su aparato al final del abdomen llamado ovopositor, porque lo usan para poner los huevos bajo tierra, introduciendole mientras efectúa la puesta.
Los grillos comunes negros son beneficiosos para el medio ambiente, ya que ayudan a controlar las poblaciones de plagas de insectos. También son una fuente de alimento para aves, murciélagos y otros animales.
El grillo común negro es similar al grillo común (Acheta domesticus), pero se distingue por su coloración más oscura. El grillo común es de color marrón claro con franjas oscuras en la cabeza y el abdomen, mientras que el grillo común negro es de color predominantemente café negruzco. Además, el grillo común tiene las alas transparentes, mientras que el grillo común negro tiene las alas delanteras de color café oscuro con dos manchas amarillas en la base.
El canto de los grillos es un sonido producido por los machos para atraer a las hembras. El canto de los grillos es producido por un órgano llamado estridulador, que se encuentra en la base de cada ala delantera. El estridulador consiste en una serie de dientes en un ala y una lima en la otra ala. Cuando el grillo canta, frota los dientes del estridulador contra la lima, lo que produce el sonido.
El canto de los grillos es un sonido complejo que varía en función de la especie. Algunas especies de grillos cantan un sonido simple, mientras que otras especies cantan un sonido más complejo con múltiples tonos. El canto de los grillos también puede variar en función de la temperatura y la humedad.
Los grillos suelen cantar por la noche, pero algunas especies también cantan durante el día. El canto de los grillos es a menudo asociado con las noches del verano, ya que es más común durante esta época del año, y es un sonido familiar para muchas personas a menudo visto como un sonido agradable. Sin embargo, el canto de los grillos también puede ser molesto, especialmente en grandes cantidades.
El canto de los grillos puede ser tan fuerte como 90 decibelios, que es equivalente al ruido de una cortadora de césped.
El canto de los grillos es una parte importante de la naturaleza y es un sonido que muchas personas disfrutan.