Ombligo de Venus (Umbilicus rupestris), la planta culinaria y medicinal de la diosa del amor

El Ombligo de Venus tiene nombre científico de Umbilicus rupestris, donde "Umbilicus" significa "ombligo" en latín, y "rupestris" significa "de las rocas" en latín. El nombre hace referencia a la forma de las hojas de la planta, que recuerdan a un ombligo, y a su hábitat habitual, que son las rocas. Como las hojas de la planta recuerdan a un ombligo, de aquí nace la denominación popular de Ombligo de Venus, en alusión a la diosa romana del amor Venus (en la mitología griega es Afrodita). Venus era la diosa romana del amor y de la belleza, y tenía un precioso ombligo en todas sus representaciones.

El Ombligo de Venus también es conocido como oreja de monte o sombrerillo, y es una planta suculenta de la familia de las crasuláceas, lo que significa que almacena agua en sus tejidos y, por esta característica, puede sobrevivir en condiciones relativas de sequía. La planta la encontramos pues en tejados y en las grietas de paredes y muros de piedra de ambientes húmedos y en laderas sombrías, siempre en zonas con abundante lluvia o con humedad ambiental.

El tamaño del Ombligo de Venus varía según la especie. En la especie más común, Umbilicus rupestris, puede alcanzar los 40 centímetros de altura. La especie Umbilicus gaditanus es más pequeña, con un tamaño máximo de 30 centímetros.

 

Planta perenne, vivaz y glabra (sin pelos)

El Umbilicus rupestris es una planta perenne, de crecimiento rastrero o colgante, que puede alcanzar los 30 centímetros de longitud. Es una planta trepadora, lo que significa que se adhiere a las rocas o a otras superficies con sus raíces. Es una planta culinaria y medicinal, que se ha utilizado tradicionalmente para tratar diversas afecciones, como la fiebre, la tos y las infecciones. También es una planta ornamental, que se cultiva en jardines de rocalla por sus hojas carnosas en forma de ombligo y sus flores vistosas. El Ombligo de Venus es una planta vivaz muy resistente, que puede tolerar condiciones de sequía y calor. Es una planta ideal para jardines de rocalla o para cultivar en macetas. Se puede reproducir por semillas o por esquejes.

Las hojas del Ombligo de Venus son carnosas y glabras (sin pelos), de forma ovalada, y de color verde intenso. Tienen un pecíolo corto y grueso. La planta recibe su nombre por la forma de sus hojas ya que del centro del limbo surge el peciolo, dando lugar en la parte superior al pequeño hoyo o depresión que recuerda a un ombligo. La inflorescencia es una umbela larga en forma de racimo espigado de flores amarillas o anaranjadas, que florecen en primavera y verano. A lo largo de este pedúnculo vertical desarrolla muchas flores de un color verde claro en forma de tubo o campanulares que aparecen entre la primavera y el verano. Fructifican en semillas numerosas y pequeñísimas, con forma ovular de un color oscuro, que son transportadas generalmente por el viento hacia otras grietas en muros o paredes donde germinar.

Uso culinario del Ombligo de Venus

Es una planta comestible, y en los restaurantes además lo utilizan como decoración de los platos, utilizando sus hojas más jóvenes. Sus hojas son comestibles por lo que durante siglos han sido consumidas frescas en ensaladas.

Ombligo de Venus en pared

Usos medicinales de las hojas

Las hojas de la planta del Ombligo de Venus se han venido utilizando tradicionalmente con fines curativos para tratar una gran variedad de afecciones. Es una planta que tiene un muy amplio repertorio de propiedades medicinales, incluyendo propiedades analgésicas, diuréticas y antiinflamatorias, siendo las más conocidas sus propiedades cicatrizantes, tanto en cataplasma o utilizando las hojas enteras como apósitos.

Desde la antigüedad, popular y tradicionalmente se han tratado con Ombligo de Venus:

  • Enfermedades de la piel (como eczema, psoriasis y llagas superficiales por quemaduras) y para desinfectar las heridas, aplicando hojas frescas de Ombligo de Venus directamente a la piel. Esto se realizaba escogiendo las hojas más jóvenes, que son las más tiernas y jugosas, y se lavaban muy bien para eliminar cualquier suciedad adherida o impureza. Una vez lavadas se podían utilizar aplicándolas de dos maneras: en un mortero machacándolas hasta conseguir una cataplasma a modo de ungüento que se aplicaba directamente sobre la zona a tratar, cubriendo posteriormente la zona con un vendaje, o también se utilizaban las hojas separando o raspando la fina piel que las recubre con navaja, alfiler o instrumento cortante para aplicar directamente esa hoja a la zona afectada a modo de apósito en contacto directo con la piel.
  • Infecciones, como la faringitis, la amigdalitis y la cistitis, tomándole en forma de infusión hirviendo sus hojas secas previamente.
  • Afecciones del sistema digestivo, como la indigestión, la diarrea y el estreñimiento, mediante infusiones.
  • Trastornos renales, mediante la utilización del jugo de las hojas, únicamente o mezclado con aceite, pues estimula la micción y deshace las piedras presentes en el riñón.
  • Afecciones respiratorias, como la bronquitis, la gripe y el resfriado común mediante la elaboración de jarabes domésticos.
  • Inflamación del oido, otitis, echando directamente unas gotas de jugo de las hojas de Ombligo de Venus en el conducto auditivo y taponándolo después. De este modo se conseguía un alivio rápido del dolor de oido.
  • Tras el parto, lavando a las parturientas con una infusión de hojas de Ombligo de Venus por considerar tradicionalmente que tenía propiedades desinfectantes.

La recolecta de las hojas y el tallo con fines medicinales se realiza preferentemente en primavera y verano, que es la época del año en la que la planta presenta más concentración en principios activos.

Usos ornamentales

La planta Ombligo de Venus es una planta silvestre ornamental popular, que embellece los muros de piedra tradicionales. Se cultiva en jardines por sus flores llamativas y sus hojas decorativas. Es importante no confundir al Ombligo de venus con el Hydrocotyle vulgaris, sobre todo antes de la floración. Aunque parecidos en sus hojas, se diferencian en que el Hydrocotyle vulgaris no es comestible, no comparte las mismas propiedades medicinales y se desarrolla en ambientes muy diferentes. Así, el Umbilicus rupestris crece en muros y paredes, donde existe un cierto grado de humedad y el agua corre sin estancarse mientras que el Hydrocotyle vulgaris se desarrolla con mucha agua en charcas y pantanos.

El Ombligo de Venus es una planta interesante y versátil que tiene un papel importante en el medio ambiente. Es una planta resistente que puede sobrevivir en condiciones adversas, y es una planta ornamental que puede añadir belleza a cualquier jardín.

Galeria

Algunas plantas de Ombligo de Venus en muros y paredes

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